ACEITE DE SÉSAMO TOSTADO SIN REFINAR ECO

Se obtiene a partir de semillas de sésamo blanco ecológicas ligeramente tostadas, que se prensan en frío. De fantástica calidad, tiene un sabor intenso y es muy fragante, con profundas notas tostadas y a nuez.

El sésamo es cosechado a mano, y este proceso manual requiere mucha mano de obra. Por ese motivo, aunque es relativamente caro, su intenso sabor hace que solo un poquito basta para llenar de sabor tus platos.
Las semillas de sésamo se secan al sol, se tamizan, se lavan para eliminar la suciedad residual que puede contaminar el sabor, se secan en el horno para preservar su sabor natural y luego se tuestan antes de prensarse en frío.

El aceite de sésamo tostado es un alimento básico en la despensa de muchas cocinas asiáticas, omnipresente en la cocina china, japonesa, coreana, del sur de la India y de Medio Oriente. Lo encontrarás en muchos adobos de carne, salsas para mojar o salpicando en el último momento un salteado vegetal.

La principal característica que diferencia nuestro aceite de sésamo tostado ecológico es que se trata de un aceite sin refinar, a diferencia del aceite de sésamo normal, que es muy neutro, está refinado, tiene un alto punto de humo y un color dorado claro, que es lo opuesto al perfil del aceite de sésamo tostado.

El aceite de sésamo tostado de calidad no se parece a ningún otro; es apenas perceptible en la lengua cuando se prueba porque su aroma toma la delantera. Esto se debe a que al tostar las semillas se desencadena la llamada reacción de Maillard que crea nuevos compuestos de sabor que se perciben en la nariz en lugar de saborearse. Ese aroma profundo, tostado y de nuez permanece en la boca. Se percibe dulzor sin saber dulce, rico sin tener mucho cuerpo y, otra contradicción, fino y no graso, pese a tratarse de un aceite.

Una de sus ventajas es que resiste de manera natural a ranciarse. Si lo mantienes alejado de la luz y en un ambiente fresco y seco, a temperatura ambiente, puede conservarse más de dos años.

Consúmelo a temperatura ambiente para que sus disfrutar de sus aromas cálidos y abiertos. Si está frío puede adquirir una apariencia turbia, será menos fragante y tendrá un sabor más apagado.

A diferencia del aceite de sésamo normal (sin tostar), el aceite de sésamo tostado es un aceite de acabado. Como tal, no debe usarse como aceite de cocina, no sólo porque es valioso, sino porque no funcionará bien. Dado que el ingrediente crudo ya se ha calentado una vez, llevarlo a temperaturas altas una vez más o durante un período prolongado puede hacer que humee, se queme y se vuelva amargo y desagradable. Su sabor característico también se disipará con la cocción abierta, ya que los aromas se evaporarán con el vapor.
Sin embargo, eso no quiere decir que el aceite de sésamo tostado no se pueda calentar en absoluto. Es maravilloso para marinar carnes, o integrado en elaboraciones de carne picada como albóndigas. El truco consiste en aumentar su temperatura suavemente.
Es delicioso mezclado con salsas y aderezos, o sobre platos terminados justo antes de servir.
Sólo recuerda usarlo con moderación; es fuerte y podría dominar otros sabores.

El aceite de sésamo tostado ecológico de alta calidad es apreciado por su contenido en ácidos grasos poliinsaturados, que incluyen ácidos grasos omega-6 y omega-9.
Estos ácidos grasos pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL ("colesterol malo") en sangre, lo que a su vez puede disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Tienen propiedades antiinflamatorias, lo que puede ayudar a aliviar los síntomas de enfermedades como la artritis reumatoide.
El aceite de sésamo tostado es rico en vitamina E y otros antioxidantes. Puede ayudar a mantener la piel suave, hidratada y protegida contra los daños causados por los radicales libres, contribuyendo a prevenir el envejecimiento prematuro.
Los ácidos grasos poliinsaturados pueden desempeñar un papel en la salud ósea al ayudar a mejorar la absorción de calcio y fortalecer los huesos.
Algunos estudios sugieren que los ácidos grasos poliinsaturados presentes en el aceite de sésamo tostado pueden ayudar a regular los niveles hormonales en el cuerpo, lo que puede ser beneficioso para las mujeres que experimentan síntomas relacionados con el ciclo menstrual o la menopausia.

Debe consumirse con moderación como parte de una dieta equilibrada.