LECHE SEMIDESNATADA SIN LACTOSA ECO

Esta leche semidesnatada tiene un menor contenido graso que la leche entera, así que mantiene todos sus nutrientes esenciales como proteínas y calcio, pero con menos calorías. 
Su sabor es más cremoso que el de la leche desnatada y tiene un toque dulce que proviene de los azúcares naturales de la leche. Para eliminar la lactosa se añade a la leche la enzima lactasa, que la descompone en azúcares simples (glucosa y galactosa) que son más dulces que la lactosa en su forma original. Por eso la leche sin lactosa sigue siendo dulce.

Su sabor delicioso tiene mucho que ver con la alimentación de las vacas que la producen en pequeñas granjas ecológicas familiares. Las vacas pasan casi todo el año pastando libremente, así que se alimentan de verdes y fértiles pastos y de piensos ecológicos.
La leche de recoge diariamente y en menos de 24 horas ya está envasada y pasteurizada, lo que garantiza su máxima frescura y su gran sabor.

El proceso de pasteurización UHT (Ultra High Temperature) consiste en calentar la leche a temperaturas muy altas, generalmente entre 135°C y 150°C, durante un corto período de tiempo (de 2 a 5 segundos).
Este tratamiento térmico elimina prácticamente todos los microorganismos patógenos y las esporas, prolongando significativamente la vida útil del producto sin necesidad de refrigeración hasta que se abre el envase.
A pesar de las altas temperaturas, el proceso UHT mantiene los valores nutricionales esenciales de la leche.

El tapón y parte del envase son de origen vegetal hecho a partir de caña de azúcar.

La leche semidesnatada sin lactosa se puede utilizar en todas recetas, de la misma manera que la leche convencional, ya que conserva las mismas propiedades.

La leche semidesnatada sin lactosa conserva todos los nutrientes esenciales como proteínas y calcio, pero con menos calorías y un sabor más dulce debido a la descomposición de la lactosa.