POLEN ECO BONA MEL 150 G

Este polen ha sido elaborado a partir de flores silvestres que se encuentran en los Parques Naturales de Sierra Mariola y La Safor, situados en la provincia de Alicante (España), a una altitud de 1.000 metros, y en Parque de La Cebollera, a más de 1.500 metros de altitud, en la provincia de Soria. Se recolecta durante los meses de verano, de junio a septiembre.
Su color variado depende de su origen botánico. Dominan los tonos amarillos, ocres y anaranjados, pero también hay granos púrpuras. Su sabor es ligeramente dulce, con una nota de acidez.

Es recolectado laboriosamente por las abejas obreras, que lo recogen tras horas de vuelo de flor en flor y lo transportan en sus patas traseras en forma de pequeñas bolitas. Los apicultores colocan trampas en la entrada de las colmenas que permiten recolectar una pequeña porción del polen que transportan sin dañar a las abejas.

El polen es un alimento altamente nutritivo, rico en proteínas, aminoácidos esenciales, vitaminas (B, C, D, E) y minerales (hierro, zinc, magnesio), que proporciona beneficios antioxidantes, antimicrobianos y antiinflamatorios. Su consumo fortalece el sistema inmunológico, mejora la energía y vitalidad, y favorece la digestión y el metabolismo.

Se puede consumir una cucharadita al día, preferiblemente en ayunas, para maximizar su absorción. Puedes añadirlo a yogures, batidos, ensaladas o cereales.
También puedes dejarlo macerar durante unos 15 minutos en líquidos endulzados, fríos o tibios.

No lo disuelvas en líquidos calientes ya que el calor puede afectar a sus principios activos más sensibles.

Contiene valiosas enzimas, vitaminas y otros compuestos bioactivos que le aportan beneficios antioxidantes, antimicrobianos y antiinflamatorios.
En su composición destaca un 18% de proteínas, incluyendo todos los aminoácidos esenciales.
Es rico en vitaminas del grupo B (especialmente B1, B2 y B6), vitamina C, D y E. Por eso aumenta la energía y vitalidad.
Contiene minerales como el hierro, zinc, magnesio, y valiosos antioxidantes (Flavonoides, carotenoides, y polifenoles.) Todo ello hace que su consumo refuerce el sistema inmunológico y las defensas.
Los aminoácidos y vitaminas ayudan a equilibrar el metabolismo, y las enzimas y fibras del polen apoyan una digestión saludable.